jueves, 28 de febrero de 2013



Ya la gente no quiere juntarse con personas tristes, porque se ha comprobado que se contagia,
y además les fastidia la vida. 
La tristeza es una enfermedad, no una poesía, pero se escribe muy bien bajo sus desperfectos. 
Ya no sé si reír y seguir viviendo o ponerme a llorar para que me salga un bonito cuento. 
Te extraño, tanto que no me ubico, ya no me hallo. Que me he vuelto tan vulgar, no por mi falda corta y pintura de prostituta, sino por mis chicles de las máquinas de a peso, porque mis ideas ya no me cuadran ni amí, ni a mi mamá que me dice loca porque es mi tercera carrera, vulgar no porque me dieron por el culo y no me volvieron a llamar, o porque acabo de decir culo; vulgar, vulgar porque te extraño y ando por la calle como si nunca hubiera sido yo y alguien mas me habitara.

sábado, 9 de febrero de 2013

Sentarme afuera de la iglesia, no como señal de rebeldía diciendo: Ni creas que voy a entrar. Mientras le hablas a alguien en el cielo.
No, sentarse afuera nomás para que vea que lo intentas.

Vino a mi mente un suceso que no ha ocurrido: "soñé conmigo" Aún cuando nunca ha pasado que yo aparezca en mis sueños, pensé en...